14.4.11

Escuela Musical

Ayer tuve la clase de música con mi hijo más grande. Luego de saludar a la bandera y demás iconos institucionales empezó la clase.

Me llamó la atención, la pasión que ponía la maestra, una chica que sería unos años mas chica que yo y que se le notaba al tocar el piano como disfrutaba que sus dedos se deslizaran bailarines sobre el mismo.

Nos explicó como de a poco iba enseñanoles a leer las notas, como cada integrante tocaba una parte respetando el tiempo del otro y que entre todos surgía la melodia.
Viendolo desde mi experiencia laboral, creo que les esta enseñando mucho más que música y eso me parece sumamente importante. Su trabajo refuerza la idea de liderazgo, trabajo en equipo, respeto por el prójimo, creatividad.
Para que los chicos se inspiraran le hacia escuchar el tema y que ellos dijeran a que se parecía el sonido, de esa manera ellos podían tocar teniendo en la mente un objeto ( eso suena como una campana seño), una cultura ( eso parece de la china seño).

Tommy tiene solo 7 años recien cumplidos, tocó junto con sus amigos un poco Mozart. Eso no es lo importante...lo realmente impresionante es que lo vi acompañar el sonido con su cuerpo y sus ojos. Me emocionó saber que realmente disfrutaba de la música, se conectaba con ella y se dejaba llevar.

Terminó de tocar y guardó la flauta en la funda, se acerco a mi y me preguntó si me habia gustado...

Anoche mientras subía las escaleras iba tarareando: tantantan tan tan tantan tan tan...
(Piano sonata n11 in A major KV 331- III Alla Turca, Allegretto)



Escrito originalmnete en facebook el Viernes, 27 de noviembre de 2009 a las 13:38

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